Los
más grandes bateadores
Ted Williams, Babe Ruth, Ty Cobb,
George Sisler, Roger Hornsby, Honus Wagner, Tris Speaker, Nap Lajoie …¡de otra
dimensión en la historia del beisbol!
Por Jesús Alberto Rubio.
Caray, siempre se discute
quién ha sido el mejor bateador de todos los tiempos en Ligas Mayores; sin
duda, una tarea muy difícil de resolver.
Por supuesto que abordar
este tema, exige ir hacia el porcentaje de bateo, jonrones, carreras anotadas y
en especial las impulsadas. Incluso, se debe medir lo que cada bateador
contribuye a ganar juegos o valorar la habilidad de aquellos que producen “a la
hora buena”, en situaciones difíciles.
También debe ponerse en la balanza las etapas de
la historia del béisbol y las condiciones en la que los jugadores actuaron. En
igual forma, hay que ver los parques, la viveza de la pelota, técnicas de bateo
y poner en consideración que los peloteros de antaño no enfrentaron al
debilitamiento que significa jugar partidos nocturnos.
Bueno, incluso, en el
béisbol moderno, ahora hay que considerar el asunto de los
esteroidea/anabólicos y bats con corcho.
“La
bola muerta”
Dándole un ligero vistazo
a las condiciones a las que se enfrentaron los bateadores del siglo 20,
encontramos que una pelota muy muerta fue empleada en la primera década, para
ser mejorada en viveza con la introducción del centro de corcho en 1910.
Diez años más tarde, la
pelota fue avivada tanto que comenzaron los porcentajes de .400 mientras la
producción de jonrones fue en aumento.
En 1919 el gran Babe Ruth
encabezó la Liga Americana en jonrones con 11. Un año después aumentó su
producción a 29 y luego en 1921 y 1922 a 54 y 59 cuadrangulares
respectivamente.
La pelota fue nuevamente
avivada en 1930, pero sólo para esa campaña.
Es una razón por la que Hack Wilson, de los Cachorros alcanzó la cifra
de 56 estacazos de vuelta entera, empujando 191 carreras. Pero un año después bajó su producción de
jonrones a solamente 13.
Durante la II Guerra
Mundial y algunos años después la pelota sufrió una baja en calidad debido a la
materia prima con motivo de la conflagración.
Después de la guerra de
Corea esas condiciones fueron mejoradas y la pelota se mantuvo estable hasta
1977. En esos años se jugó sin duda con
la pelota más viva de toda la historia.
La pregunta muchas veces
se hace sobre por qué los porcentajes de bateo están hora por abajo de aquellos
primeros días.
La respuesta es que los
bateadores modernos tienen que enfrentarse a pitchers que tiran más fuerte,
tienen mayor variedad de lanzamientos, conocen más de pitcheo debido a mejor
enseñanza y sobre todo han desarrollado curvas rápidas que enloquecen a los
bateadores.
Los
relevistas
Además, hay otro factor
clave: los relevistas, ahora reales especialistas, que hacen la vida pesada de
los bateadores. Sin embargo no solamente los pitchers son los que forman la
historia completa.
En general los jardineros
actuales son más rápidos y mejores que los antiguos, tienen mejores brazos y en
el caso de la Liga Americana los que no son buenos fildeadores son dedicados
desde 1973 al nuevo arte de Bateador Designado.
Los guantes que se usan
en los años modernos son fantásticos a comparación a los que se empleaban
antes. Eso quiere decir que muchos
batazos que dan en la actualidad y son outs, habrían sido hits en otros
tiempos.
El
Bambino
A Ted Williams se le califica como el Mejor
Bateador de Todos los Tiempos; sin embargo, Babe Ruth debería ocupar el primer
lugar en la historia del béisbol.
Y es que el Bambino tuvo
varias ventajas sobre Williams: El Yankee Stadium era mejor para que los zurdos
dieran de jonrón y es indudable que Ruth tuvo compañeros más poderosos en el
orden al bat que los ayudaban en todos los aspectos.
De cualquier manera, sin
pensar en ese escenario, Ruth fue el bateador más devastador que ha conocido el
beisbol.
Se retiró con aquella
histórica marca de 714 cuadrangulares de todos los tiempos, la que Hank Aaron,
33 años después, la superó el 8 de abril
de 1974.
Bateó por vida .342 con
2,132 carreras impulsadas, 506 dobles, 136 triples, incluyendo 16 una
temporada. Se robó 123 bases.
Logró 4 temporadas de más
de 50 cuadrangulares y 11 de más de 40… en fin. Algo notable y por demás
grandioso, ¿no?
Es el No. 1 en slugging
de todos los tiempos (.690), seguido de Ted Williams (.634).
El Babe, fue nombrado el
Mejor Pelotero del Siglo 20, sobre Willie Mays, Hank Aaron, Ted Williams, Ty
Cobb, Joe DiMaggio, Walter Johnson, Lou Gehrig, Jackie Robinson y Honus Wagner.
Al iniciar la segunda
década del siglo XX, primero como
pitcher y luego poderoso bateador, Babe Ruth le había dado nueva vida al
beisbol.
Ted
Williams
Perdió cinco temporadas
por las II Guerra Mundial y la de Corea; sin embargo, sus registros trascienden
en la historia del béisbol ubicándolo como uno de los mejores bateadores de
todos los tiempos.
El famoso “Splendid
Splinter” ganó la triple corona en 1942 y en 1947 y dos veces fue nombrado JMV
de la Liga Americana… siempre con los Red Sox.
Es el último bateador que
ha terminado una temporada con un promedio superior a .400. (.406).
Tuvo “el mejor ojo” y el
swing más elegante y perfecto que le llevó a encabezar en bateo al nuevo
circuito en seis temporadas.
Mantiene marcas por más
años consecutivos encabezando la liga en carreras anotadas (cinco) y bases por
bolas (seis) y por carreras (.483).
Ganó también cuatro
coronas de jonrones, encabezó la LA en “slugging” (bases alcanzadas con sus
batazos) nueve veces, y terminó su carrera con un promedio de bateo de .344 y
521 jonrones.
Al concluir los años 50,
The Sporting News lo declaró el “Jugador de la Década”.
Ty
Cobb
Hay quienes miran a Ty
Cobb, por tener el mejor promedio de bateo, .367, además de que retuvo por
décadas el récord de más hits (4,192), que actualmente posee Pete Rose (4,256).
Tiene el mayor número de
robos de home de por vida: 54; más títulos de bateo (12); bateó un promedio
superior a .300 durante 22 temporadas consecutivas y en cinco veces
consecutivas fue campeón bat para la marca.
Logró un promedio
superior o igual a .400 en tres ocasiones (1911, 1912 y 1922). También ganó la
Triple Corona en 1909 (.377-9-107).
Sin embargo, en su carrera solamente dio 118 jonrones y
produjo 1.933 carreras en 12,686 veces al bat. Cobb no era un slugger, lo que
explica su pobre promedio de .119 en carreras empujadas.
En sus últimos nueve
años, debe hacerse notar, la pelota viva y estaba en uso, pese a lo cual la
producción de Ty Cobb en jonrones, producidas y average estuvo por abajo de
otros que jugaron en ese período.
Cobb aparece en el lugar
24 entre los bateadores del siglo 20 con su promedio de .169 para carreras
empujadas. Y a pesar de su promedio de
.367 aparece en octavo lugar en el renglón de alcanzar la primera base y anotar.
“El
Holandés Volador”
Honus Wagner fue también alguien por demás
especial… o demasiado sensacional con su bat:
Logró ocho títulos de
bateo; dos banderines de la Liga Nacional (1903 -1909); cinco títulos de
carreras impulsadas en 18 temporadas con Pittsburgh. Igual, lideró en bases
robadas y average de slugging en 5 y 6 ocasiones respectivamente.
Desde sus años de inicio
con Louisville Colonels/Liga Nacional (1887-1999), mantuvo su average de bateo
arriba de .300 en 17 temporadas consecutivas. Llegó a dos series mundiales
ganando la de 1909 frente a los Detroit Tigers con su estelar Ty Cobb.
En 21 años bateó .328. Y
mire esto otro: También fue líder cinco veces en estafas e igual cifra en
producidas; ocho veces en dobles y tres en triples.
En 9 de junio de 1914, se
convirtió en el primer jugador de la Gran Carpa en llegar a los 3 mil hits;
hazaña que ese año también alcanzó Nap Lajoie, de Cleveland.
Jugó 2,792 partidos,
retirándose con 3,430 hits, 651 dobles, 252 triples y 722 bases robadas.
En 1936, Junto a Babe Ruth, Ty Cobb, Christy Mathewson y
Walter Johnson, fue uno de los primeros cinco inducidos al Salón de la Fama en
Cooperstown.
Roger
“Rajah” Hornsby
Muchos observadores han
calificado a Rogers Hornsby como el más grande de los bateadores derechos de
todos los tiempos.
“Rajah” está conceptuado
como uno de los mejores bateadores derechos de todos los tiempos, algo que
hasta antes de la segunda década del siglo XX no había conocido el beisbol de
Ligas Mayores.
Y es que mientras en los años
20´s las actuaciones de Babe Ruth sorprendían a la fanaticada, este jovencito
texano que jugaba la segunda base para los Cardenales de San Luis, había
empezado la década con un alto porcentaje de bateo de .370.
Roger Hornsby, tres veces
bateó arriba de .400 jugando para Cardenales de San Luis y terminó su carrera
con un average impresionante: .358, el segundo mejor en toda la historia de
Ligas Mayores, abajo del .367 de Ty Cobb, “el Durazno” de Georgia.
En promedio, entre 1921 y
1925, logró .402 de average luego de conectar .397, .401, .384, .424 y .403. Dos
veces ganó la Triple Corona de Bateo:
1922: .401, 152 CP y 46
HR, además anotó 141. y en 1925: .403,
143 CP y 39 HR.
A partir del 20, el joven
segunda base logró seis títulos consecutivos de bateo en la Nacional (del 21 al
25) y en la década acumuló un average por demás impresionante: .380.
Aquel 1922, San Luis, fue
la capital del bateo en el mundo:
George Sisler, con .420
jugando para los Cafés, y Hornsby .401. Entre los dos, coleccionaron un
tremendo .496.
Con San Luis llegó a
batear sobre los .400 en tres diferentes años para así poder terminar su
carrera con ese impresionante promedio de .358.
George
Sisler
Se dijo que George Sisler
era lo más cercano al jugador perfecto.
El primera base de los
Cafés de San Luis promedió dos veces sobre los .400 (.407 en 1920 y .420 en
1922), ganando en ambos años el campeonatos de bateo.
Su .420 es el tercer
promedio más alto del siglo 20, abajo del de Rogers Hornsby (.424 en 1924) y
Nap Lajoie (.426 en 1901).
Ese año, el nuevo
circuito estableció el Premio JMV y George Sisler fue el gran ganador.
Bueno, también esa
campaña tuvo una formidable racha de 41 partidos consecutivos pegando de hit,
siendo el récord de la Liga americana hasta que Joe DiMaggio la rompió en 1941
con 56.
También había logró 257
inatrapables, que fue la gran marca hasta que Ichiro Suzuki la dejó atrás (262)
en el 2004.
Y anote esto último: Fue
líder en en carreras anotadas (134 en 1922); en hits (257 en 1920) y 246 en 1922);
en estafas ) 45 en 1918), 35 en 1921, 51
en 1922 y 27 en 1927.
Concluyó su carrera de 15
años con 2,812 hits.
Nap
Lajoie
Nap Lajoie fue la primera
gran figura de bateo del siglo XX y el más importante rival de Ty Cobb
hasta su retiro en 1916.
Descendiente de
franco-canadienses, Lajoie nació en Woonsocket, Rhode Island, comenzando su
carrera en 1896 con los Phillies de la Liga Nacional donde logró liderar el
departamento de carreras impulsadas en 1898.
En 1901 cambió de equipo
y de liga uniéndose a los Atléticos de Filadelfia, propiedad de Connie Mack.
Con ellos bateó .426,
cifra aún record de la Liga Americana y al ser campeón en jonrones (14) y
producciones (125), pues ni más ni menos que ganó la Triple Corona de Bateo.
Ese año de convirtió en
el primer jugador a quien se le otorgó una base por bola intencional con las
bases llenas en la historia de las Ligas Mayores.
Nap fue campeón
impulsadas en la Liga Nacional (1898) y en la
Americana (1901-1904). 5 veces líder bate de la Americana (de 1901 a
1904 y 1910).
Encabezó .con 300 en 16
de sus 21 temporadas; bateó diez veces más de .350 y su promedio de por vida
fue de .339.
Tris
Speaker
En 22 temporadas, Tris
Speaker, conocido como “El Aguila Gris” acumuló
.345, con 3,514 hits y 792 dobles; tuvo un poderoso brazo, velocidad
innata y fue un excelentísimo jardinero central.
Dice el colega
historiador Edwin Vázquez que “Tenía un instinto único para jugar béisbol, su
sentido para perseguir pelotas hacia su
espalda lo consagró de gran manera (gustaba de jugar el bosque central muy corto) como un
superdotado de esa posición”.