Al Bat
Jesús Alberto Rubio
Martín Dihigo: mis respetos y admiración eterna.
Está conceptuado como uno de los
jugadores más completos que ha producido el beisbol latinoamericano y quien en
base a sus proezas, hoy por hoy tiene nichos de oro en los Salones de la Fama
de Estados Unidos (Ligas Mayores y Ligas Negras), además de Cuba, México,
República Dominicana y Venezuela.
De
hecho, en Ligas Mayores fue el primer pelotero cubano en lograr ingresar a ese
recinto.
Y
lo hizo sin haber jugado en esa Gran Carpa.
Cuenta
la leyenda que incluso en aquellos días Dihigo le ganó una competencia de tiro
a un jugador de Jai Alai. Su fuerza en el brazo ha sido comparada con la que
muchos años después mostró el inolvidable Roberto Clemente.
Al
igual que los demás peloteros que en su época no podían jugar en Ligas Mayores
por la segregación racial Dihigo entre 1923-1945, además de las Estrellas
Cubanas, militó con varios equipos de las Ligas Negras, como el Homestead
Grays, Philadelphia Hilldales, Baltimore Black Sox y New York Cubanes, así como
en clubes de Puerto Rico, Venezuela y México.
A
sus 20 años de vida ya era un muy efectivo y fino bateador.
Impresionaba
sobremanera.
Bateó
sobre los .400 en tres diferentes ocasiones y dos veces fue campeón bat en
distintos circuitos.
Incluso
en 1936 conectó un jonrón de 500 pies en el estadio de Pittsburgh.
En
1926 y 1935 fue campeón jonronero.
En
1936 fue mánager-jugador de los Lepardos de Santa Clara, en Cuba.
Su
.316 en Ligas Negras manifiestan su calidad bateadora con todo y que
también era pitcher abridor, jardinero y relevista cuando figuraba como
mánager.
Dihigo
dirigió a los New York Cubans, en México y Cuba, hasta 1950.
También
jugó las nueve posiciones en varios partidos.
Primer
sin hit... dos triples coronas
Martín
Dihigo, luego de su gran actuación en Ligas Negras, llegó a nuestro beisbol de
verano en 1937 y para demostrar su real valía de inmediato demostró que era
algo grande: Lanzó para El Águila el primer juego sin hit ni
carrera en la historia de la Liga Mexicana, blanqueando 4-0 a Nogales (16 de septiembre),
en Veracruz.
Más
tarde, fue también el primer bateador que conectó de 6-6 (contra Agrario) el 18
de septiembre en el Parque Delta.
Ese
37 El Águila obtendría su primer título del circuito gracias a su majestad el
pitcheo de Dihigo, quien en la serie final contra Agrario --en serie a ganar 3
de 5-- el de Matanzas sería el puntal en la loma:
Primero
venció el 11 de octubre 3-2 a Basilio “Brujo” Rosell; al día
siguiente 7-2 a Alberto Romo Chávez y el jueves 16 completaría la limpia al
imponerse 6-4 de nueva cuenta a Romo Chávez.
Dihigo
lanzó los tres juegos completos... ¡en 6 días!
Y
lo más importante fue que siempre “pidió la bola” al mánager Agustín
Verde.
Pero,
no se me vaya:
Dihigo,
sería más que formidable: dos veces, el 38 y el 42, se adjudicaría la triple
corona de pitcheo, algo que nadie ha hecho.
Ganar
la triple corona de pitcheo, solamente cuatro lanzadores han consumado tal proeza:
Dihigo, Fred Waters, Panchillo Ramírez y Francisco Campos.
1938: Águila, 18-2, 0.90
y 184 K.
1942: con Algodoneros de
Unión Laguna: 22-7, 2.53 y 211 K.
1955: Fred Waters, Tigres
de México: 18-3, 2.06 y 126 K.
1956: Francisco Ramírez,
Diablos Rojos, 20-3, .225 y 148 K.
2004: Francisco Campos
Piratas de Campeche, 12-2, 1.47 y 99 K.
Pero
Dihigo fue más allá en 1938: obtuvo el banderín de bateo, con
.387.
O
sea, una campaña.... asombrosa.
Y
claro, fue la inspiración para que El Águila ganara su segundo banderín del
circuito, dirigidos de nuevo por Agustín Verde.
Para
1942, defendiendo el uniforme del Unión Laguna de Torreón, en su rol de mánager-jugador
logró su triple corona de pitcheo llevando al equipo a su primer título en su
historia dentro de la LMB.
¿Más…?
Martín Dihigo posee los récords de más ponches (34) en dos juegos
consecutivos.
Ese
truco lo hizo en 1939 con El Águila y el de más temporadas (4) siendo líder en
abanicados.
Cuatro
años fue pitcher campeón en ganados y perdidos y dos veces en efectividad.
Luego
de su carrera de once años y 213 juegos, Dihigo debe seguir siendo el mejor en
porcentaje de juegos ganados y perdidos al acumular 119-57.
Una
vez ponchó a 18 en juego de 9 episodios.
Jugó
con El Águila del 37 al 39. Del 40 al 50 militó para Torreón, Azules de
Veracruz, México, Nuevo Laredo y San Luis Potosí.
Dihigo
murió el 20 de mayo de 1971 en Cienfuegos, Cuba.
Martín
Magdaleno Dihigo Llanes, grande como su físico de 1.88 y 190 kilos, algo por
demás notable en aquellos días.
“El
Maestro” en México y “El Inmortal”, en Cuba.