lunes, 1 de octubre de 2018


TESTIMONIO DE UN ANABISTA... ¡LEALTAD!



Queridos amigos anabistas: es maravilloso  tener la oportunidad de comunicarme con ustedes. 

Sí, conocerlos, tratarlos  y vivir juntos un movimiento tan grande como el de la ANABE, ha sido un privilegio que nos dejó marcados de por vida, un tatuaje que se irá con nosotros cuando ya no estemos en este mundo, pero les dejaremos a nuestros descendientes el legado.

Del barro que están hechos todos ustedes ya no hay gente que nazca, incluidas sus esposas como Ana de Zavala, Vilma de Zamudio y cada una de ellas.

Tengo una hija que se llama Anabel que nació el 15 de Septiembre de 1980 y le pusimos el nombre en honor a nuestro movimiento.

Quisiera tener en esta vida la oportunidad de volver a verlos a todos... ojalá nuestro Dios nos conceda eso!

De cada uno de nosotros que formamos la Liga Nacional, del señor Ramón Hernández nuestro presidente, un hombre de una sola pieza, Mariano Albor, la estrella que alumbró nuestro camino, imborrables sus enseñanzas, sus consejos, sabiduría y todo lo que nos entregó junto con los hermanos Ortega, el Lic. Hernán González, Javier Muñoz y los demás asesores. Amén de miles de gentes que estuvieron y siguen estando por ahí para nosotros.

Cada equipo que se formó en nuestra liga está grabado en mi mente.

Cómo olvidar a los Metropolitanos, a los que les tocó batallar tanto, sacrificarse pero jamás rendirse, cada uno de ellos merecen un reconocimiento especial y lo tendrán por siempre.

Cómo olvidar el equipo de Querétaro con Arturo Rey, "Carbonero " López, Arturo Bernal , Rolando Camarero y tantos otros.

Creo firmemente que en esta etapa de nuestras vidas aún se puede hacer algo por tantos beisbolistas que dedican gran parte de su vida activa al Béisbol Profesional.

También creo que podemos organizarnos y formar y formar una comisión para conseguir una cita con nuestro Presidente Electo que ama el béisbol y debe de conocer la historia de esta asociación, plantearle alguna idea que pueda ayudar a resolver la situación de nuestros compañeros que requieren de apoyo para llevar un vida decorosa.

Desgraciadamente nuestro amigo inolvidable René Chávez y otros no pudieron tener esa oportunidad. 

Cuenten conmigo para lo que sea, por motivos de trabajo no dispongo de tiempo para viajar pero aquí estamos y estaremos siempre para todos.

Los quiero, los respeto, los admiro infinita y eternamente...

Su amigo

JOSÉ ELGUEZABAL, a 29 de septiembre del 2018.

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